El nombre de la variedad Lechín proviene del color blanquecino de su pulpa, que recuerda a la leche. Su maduración es temprana y su recolección compleja y costosa por la alta adhesión del fruto a las ramas. El aceite virgen extra Lechín es fluido, de color amarillo verdoso y textura densa. Presenta un aroma frutado medio y matices almendrados verdes y de vegetales frescos. Su sabor apenas es picante ni amargo, y en su conjunto es equilibrado. No es habitual encontrar aceite de oliva virgen extra monovarietal de la variedad Lechín. Debido a su baja estabilidad, es habitual que se presente en Coupages con variedades más resistentes a la oxidación, como la Picual u Hojiblanca.